No voy a negar que Alexis Sánchez es un jugador distinto, gambeteador, con hambre de triunfos, pero quiero llegar un poco más allá de eso... a River Plate.
"Chile", el nuevo apodo del Niño Maravilla, se ha ganado los elogios de casi todo su entorno en Argentina - compañeros, Daniel Passarella, la hinchada de River y la prensa deportiva argentina- y si bien él es un jugador que provoca ilusión en los hinchas, es conveniente analizar al momento del club donde está.
River es un equipo que hace cuatro años no consigue nada, tiene a su hinchada ávida de algún título -ya sea nacional o internacional- por ende, no hay que hacer mucho para volver loco a los fanáticos rioplatenses.
Es peor aún el presente de River, si se toma en cuenta la cantidad de dinero que han gastado para conformar el plantel que tienen.
- Pagó ocho millones de dólares por tres jugadores: Cristian Villagra, Marco Ruben y Juan Marcelo Ojeda. Ninguno de los tres es titular indiscutido.
- River trajo jugadores de Europa, Leonardo Ponzio y Mauro Rosales, quienes tampoco son titulares fijos pero sí significan un gran sueldo para el club.
Basta remontarse a la última etapa de Reinaldo "Mostaza" Merlo en el club. Radamel Falcao García metió una seguidilla de goles y los volvió locos a todos. Más cerca en la memoria colectiva está el verano de 2007, cuando Nelson Rivas, con un par de patadas a los delanteros de Boca -Rodrigo Palacio y Martín Palermo- fue ovacionado por toda la tribuna del cuadro del Río de la Plata.
Y bueno, están con las manos vacías desde hace mucho tiempo ... y un joven escurridizo, gambeteador, corredor, atrevido y con hambre llamado Alexis los ha hecho volver a creer.
No se engañen rioplatenses... no es fácil emular al Matador Salas.
imágenes de : www.lasegunda.com
www.snhostal.com
